ETT Transferencia de Tecnologías® es una empresa chilena que desde el 2002 ha estado orientada al desarrollo de soluciones innovadoras en instrumentación y control basadas en investigación aplicada, que buscan apoyar los procesos productivos en la industria minera y manufacturera.

Este año fueron ganadores del Premio Avonni 2020 en la categoría “Campomar”, reconocimiento que busca visibilizar los casos de éxito de empresas locales que están creando valor mediante la innovación, por su sistema de inspección de molinos “SAG Scanner®”.

A través de esta tecnología, ETT ofrece la generación de nueva información al monitorear visualmente el interior de los molinos semiautógenos (o SAG), considerados un cuello de botella en las plantas mineras, sin necesidad de detenerlo totalmente.

El sistema captura, analiza y despliega imágenes infrarrojas del interior del molino y de su carga de mineral y bolas, utilizando algoritmos de Visión Artificial que permiten calcular parámetros concretos, útiles para el control, para el análisis metalúrgico, y para el mantenimiento del molino.

Actualmente la compañía se encuentra activamente trabajando con Los Pelambres -de Antofagasta Minerals- y Escondida -de BHP-. Además, está en curso la fabricación de equipos para Spence -también BHP- y en fase de ingeniería con Minera Antamina en Perú.

En entrevista con Expande, Ennio Perelli, Gerente General de ETT, se refiere al reconocimiento otorgado recientemente y a las nuevas oportunidades y desafíos de la compañía.

– Este año fueron ganadores del Premio Avonni en la categoría “Campomar” ¿Cómo reciben el reconocimiento?

Fue una sorpresa muy grata y reconfortante. Da gusto que después de tanto tiempo de trabajar en innovación empiecen a aparecer este tipo de reconocimientos, que además dan cuenta de que en Chile se crean soluciones de clase mundial, y con mucha más creatividad de las que se pueden encontrar en otros países cuando se trata de nichos de mercado en que el país tiene vasta experiencia, como la minería.

Tras recibir el premio, varios antiguos interesados retomaron el contacto con nosotros, y no solamente en Chile, sino que también desde Australia y Perú.

En este contexto, Avonni refresca nuestra visibilidad en el ecosistema, ampliando nuestro mercado al demostrar que la solución que estamos presentando tiene un valor y un sello de garantía reconocido por instituciones importantes.

– ¿En qué consiste la solución SAG Scanner por la que fueron reconocidos y qué desafío en la industria minera busca resolver?

Un molino SAG es un cuello de botella en una planta minera, con un consumo energético equivalente a una ciudad pequeña. Además, es muy ineficiente e inestable y normalmente por cada línea productiva existe solo uno. Entonces, si el molino SAG tiene problemas, en efecto dominó se detiene la planta completa, es decir, se pausa la producción de metal.

Adicionalmente, para poder controlar un proceso tienes que saber qué pasa con éste.  Todo lo que se había hecho hasta el momento eran mediciones indirectas para poder inferir lo que estaba pasando en su interior, lo que si bien en general funciona bien, hay momentos en los que el equipo se sale de su rango operacional normal, no hay certezas sobre lo que pasa y hay que pararlo para inspeccionar, retirar el chute de alimentación, que es una maniobra que toma tiempo y es riesgoso. Ese problema lo evidenciamos en muchos molinos alrededor del mundo durante los últimos 20 años.

En este contexto, desarrollamos SAG Scanner®, sistema de instrumentación de naturaleza óptica, que posicionado estratégicamente en el molino SAG, permite recoger datos y monitorear el interior de este sin necesidad de detenerlo totalmente, pese a la agresividad del medio donde está inmerso, porque sus partes más expuestas a daño se mantienen normalmente autoprotegidas de daño mecánico, y suciedad.

El sistema analiza las imágenes capturadas con algoritmos que permiten calcular parámetros concretos, útiles para el control, para el análisis metalúrgico, y para la programación de mantenimiento del molino. Con el tiempo hemos ido incorporando nuevas mediciones y tenemos otras nuevas en vías de desarrollo.

Respecto a los beneficios, por ejemplo, hace poco tiempo hicimos un análisis sobre el ahorro que tuvo uno de nuestros clientes en un solo mes de uso de SAG Scanner: percibieron un retorno mínimo de US$1.6 millones/mes.

– ¿En qué se encuentra el desarrollo e implementación de la tecnología?

Actualmente tenemos sistemas operativos en Minera Los Pelambres de Antofagasta Minerals, Escondida de BHP, y estamos fabricando para Minera Spence, también de BHP. Además, estamos en la fase de ingeniería para Minera Antamina en Perú, con los que estamos planificando empezar a fabricar a principios del próximo año.

– ¿Cómo visibilizan el futuro de ETT en los próximos años?

Si bien nuestra idea es avanzar con seguridad y sustentabilidad, nos gustaría expandir la solución a otros países. De hecho, ya estamos operando directamente en Perú, pero el siguiente desafío es Australia. Lo vamos a conseguir, pero no nos queremos apresurar. Consideramos preferible dar los pasos importantes siempre cuidadosamente.

– ¿El desafío de abrirse a nuevos mercados lo canalizarán de manera independiente o en alianza con un socio?

Estamos barajando algunas alternativas. Podríamos hacer un esfuerzo de venta desde Chile y trabajar con un representante técnico en Australia, o bien trabajar desde el comienzo con una empresa que sea más grande, que tenga una presencia más amplia en plantas y haga el cruce de fuerza de venta. Si bien ambas puertas están abiertas, estamos pensando más en la segunda opción.

– ¿De qué manera Expande ha venido apoyando y habilitando el camino de su empresa en la industria minera?

Para nosotros Expande ha sido muy importante y destacamos su modelo porque abre más puertas. Además, al hacer un primer filtro frente a las mineras mandantes, representa una garantía de seriedad de cada propuesta que llega al cliente final. Avanzamos mucho más en dos años con Expande que en seis en forma directa. Cabe destacar que a Escondida y Pelambres entramos gracias al modelo de Innovación abierta de Expande, quienes a su vez nos permiten llegar a otras plantas con referencias concretas y casos de éxito.